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Puntos clave de la primera legislación mundial que regula la inteligencia artificial
Imagen generada con una herramienta de IA
La inteligencia artificial (IA) ha llegado para quedarse. A nadie se le escapa que ya hace tiempo que nuestra cotidianidad está llena de procesos de IA que nos hacen más fácil el día a día. La famosa Siri de Apple o Alexa de Amazon, los dos asistentes virtuales más conocidos, son ejemplos claros de IA en nuestros quehaceres cotidianos. Asimismo, el uso en el campo de la medicina para ayudar en el diagnóstico de enfermedades o los coches autónomos, que combinan sensores, radares e IA, son otros de los avances más conocidos de esta revolucionaria tecnología.
Es por eso que el Parlamento Europeo se puso manos a la obra en la redacción de un nuevo reglamento para regular la IA con el objetivo de fomentar su desarrollo seguro en la Unión Europea. Esta normativa, pionera a nivel mundial y que busca equilibrar la innovación tecnológica con la protección de los derechos y libertades de la ciudadanía europea, entró en vigor el pasado 1 de agosto y se aplicará progresivamente hasta 2026. Las empresas e instituciones ya han empezado a prepararse para cumplir con las nuevas obligaciones, que tienen el potencial de transformar de forma significativa el ecosistema tecnológico europeo. ¿Te parece si repasamos juntos sus principales efectos?
Puntos clave del Reglamento de IA
1. Enfoque basado en el riesgo: El reglamento clasifica los sistemas de IA según su nivel de riesgo inaceptable, alto o limitado. Esto determina las obligaciones de los desarrolladores y usuarios de IA teniendo en cuenta el uso que se haga de esta tecnología. Por ejemplo, los sistemas de alto riesgo, como los usados en la salud o la seguridad pública, tendrán requisitos más estrictos de seguridad y transparencia.
2. Transparencia y explicabilidad: Los proveedores de IA tienen que garantizar la transparencia de sus sistemas. Esto incluye documentar y publicar los algoritmos y los conjuntos de datos usados, especialmente en sistemas generativos como ChatGPT. Esto ayuda a evitar la generación de contenidos ilegales y permite a los usuarios comprender la toma de decisiones basadas en IA.
3. Impacto en las PYMES e innovación: Para no frenar la innovación, la ley prevé exenciones para las actividades de investigación y los componentes de IA proporcionados bajo licencias de código abierto. También se fomentan los llamados “sandboxes” reguladores, donde se pueden testear nuevas tecnologías en un entorno controlado antes de su implementación masiva.
4. Derechos de la ciudadanía: Los ciudadanos podrán reclamar ante las autoridades supervisoras si consideran que un sistema de IA vulnera sus derechos. Además, tendrán derecho a recibir explicaciones sobre las decisiones importantes tomadas por sistemas de alto riesgo que afecten a sus derechos fundamentales, ya que la defensa de los derechos y libertades de las personas es uno de los pilares de la normativa.
5. Supervisión y sanciones: Cada estado miembro creará una entidad supervisora para garantizar el cumplimiento del reglamento. En España, la Agencia Española de Supervisión de la IA será la principal autoridad. El régimen sancionador prevé multas que pueden llegar hasta los 35 millones de euros o el 7% del volumen de negocio anual global, según qué cifra sea mayor.
Impacto del reglamento en la sociedad
La ley pretende garantizar que los beneficios de la IA puedan aprovechar de forma segura y ética. Esto incluye proteger los derechos fundamentales de la ciudadanía europea, como el derecho a la privacidad, la no discriminación y la seguridad. Po ejemplo, los sistemas de alto riesgo tendrán que superar evaluaciones de conformidad para asegurar que no infringen estos derechos.
Además, el reglamento fomenta la transparencia y la explicabilidad de los sistemas de IA. Esto significa que los usuarios tendrán derecho a entender cómo funcionan los algoritmos que toman decisiones importantes que les afecten. Por ejemplo, si una persona es rechazada para un trabajo mediante un sistema automatizado, tendrá derecho a saber qué criterios se usaron en la toma de esta decisión.
Con esta regulación, pionera en el mundo, la UE lidera la protección de los derechos humanos en la era de la IA, asegurando que esta tecnología se desarrolla de forma responsable y en beneficio de todos.
No tenemos que olvidar que a pesar de sus amenazas, la IA ofrece todo un mundo de posibilidades que nos pueden ayudar a hacer más fácil o rápidamente ciertas tareas. Sin ir más lejos, en Dispromèdia hace ya un tiempo que utilizamos herramientas de IA para buscar ideas o contrastarlas en las áreas de programación, diseño o márquetin. En fin, que la ley aprobada por la UE quiere garantizar que lA sea una excelente aliada para nuestra sociedad. Volveremos a hablar de ello más adelante.
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